martes, 24 de septiembre de 2019

EL VALOR DE COMPARTIR.








En estos días estoy trabajando con mis alumnas del aula específica y sus  familias, la importancia de compartir ,para ello hemos visto el corto que os he dejado anteriormente.

¿ Por qué es importante compartir?

Aprender a compartir no es ir al parque y obligar a nuestros pequeños a dejar el cubito a otros niños, a pesar de las rabietas, los llantos y las negativas.

El compartir es un proceso largo que cuesta tiempo y requiere un aprendizaje. Al principio los niños lo quieren todo para ellos, son celosos con sus pertenencias. Esto se debe a que los bebés, por naturaleza son egocéntricos, ven el mundo desde la perspectiva de ellos mismos, sin saber ponerse en el lugar de los demás.

En los tres primeros años de edad, a los niños les cuesta mucho compartir. Es la edad del “mío”, lo cual defenderán a toda costa. A estas edades no se puede esperar que el niño comparta de buena manera.

Es a partir de los tres años, cuando empiezan a sentir gustos y afectos y además comienzan a compartir sus pertenencias . A los cinco años, ya comparten con sus iguales, ya que disfrutan mucho más de los juegos en grupo, que en los juegos individuales.


Como papás y maestros, todos queremos que los niños compartan, que sean generosos, justos, y juegan bien con otros. De todas maneras, saber compartir puede ser un desafío. En lo del desarrollo, muchas veces es difícil para los niños considerar los deseos y sentimientos del otro, sobre todo cuando se les pide que entreguen alguna cosa. Pero esto no quiere decir que sea imposible enseñarles a compartir a los niños. De hecho, el guiarles durante el proceso de compartir les ayuda a desarrollar habilidades más fuertes. Aquí hay algunos consejos para apoyar el proceso de aprender a compartir en la casa o el salón de clase:
Definir lo que es compartir
  • ¿Qué quiere decir compartir? Uno de los pasos importantes para enseñarles a los niños a compartir es dedicar tiempo para explicarles que hay muchas maneras para compartir. Al hablar acerca de todas las diferentes maneras que podemos compartir le demuestra a los niños que compartir ayuda a que todos se diviertan más, y es más que solamente entregar su juguete preferido. Hay diferentes maneras de compartir. Se puede:
    • Compartir los materiales (juegos, juguetes, pintura y pinceles, etc.)
    • Compartir el espacio a su alrededor
    • E incluso compartir los amigos
  • ¿Por qué es importante compartir? Aunque está bien si los niños deciden no compartir de vez en cuando, el demostrarles porqué es importante compartir puede motivarles a compartir con más frecuencia. Cómo explicar la importancia de compartir varia con la edad o desarrollo de cada niño, pero aquí hay algunas frases útiles que se puedan usar en muchas situaciones:

  • Compartir es una buena manera de ser un amigo

  • Compartir les hace sentir bien a otros

  • Compartir también ¡te hace sentir bien a ti!

  • Cuando compartimos, es más probable que otros compartan con nosotros también

  • ¡Es divertido compartir con otros!
Enseñar habilidades en vez de resolver el problema
Cuando explicamos, guiamos y practicamos una habilidad nueva con niños, estamos orientándoles hacia la independencia y un conocimiento más profundo de la habilidad. Esto se llama el método de andamios. En cuanto al compartir, armar un andamio de soluciones con los niños (en vez de meterse para resolver sus problemas) les provee la oportunidad de fortalecer su habilidad para el largo plazo.
En vez de decir cosas como, “Tienes cinco minutos más con el camión y luego le toca a Jesús,” considere dándoles a los niños sus propias frases que pueden utilizar para que puedan tener éxito sin la intervención de un adulto. Con niños más pequeños o ellos que necesitan más apoyo para desarrollar esta habilidad, puede modelar frases que el niño puede utilizar hasta que se sientan cómodos utilizándolas solos. Esto le permite al niño tener control sobre la situación y le da la oportunidad de armar su propio éxito. Aquí hay algunas frases que se pueden enseñar a los niños:
  • Cuando le pide que otro comparta con él/ella: 

  • “¿Puedo jugar contigo?” 
  • “¿Puedo usarlo cuando termines?”
  • “¿Te gustaría hacer algo juntos?”
  • “Me gusta tu torre/dibujo/rompecabezas. ¿Puedo intentarlo yo?”
  • Cuando otro le pide que él/ella comparta: 

  • “¡Claro, ven a jugar!” o “¡Juguemos juntos!”
  • “Cuando termine, te toca a ti”
  • “En dos minutos”
  • “Lo esto usando ahora, pero te lo daré cuando termine”
  • Cuando otros niños dicen “no”, es importante tener frases útiles como:

  • “Ni modo”
  • “Quizás más tarde”
  • “Voy a hacer otro cosa”
¿Qué más podemos hacer?
Además que proveer el lenguaje para compartir, hay varias otras maneras que nosotros como padres y maestros podemos motivar a los niños a compartir:
  • Modelar. Sus ojos le miran a usted, así que haga todo lo posible para modelar cómo compartir. Modelar buenas maneras para pedir las cosas, buenas respuestas cuando alguien le pida que comparta, tanto como cómo manejar la decepción cuando las cosas no salen como quisiera.
  • Practicar. Antes de hacer una actividad que requiere que los niños compartan, ¡practíquelo! Si van a usar plastilina, practique cómo pedirle a alguien que comparta y qué hacer si alguien te lo pide a ti.
  • Proveer oportunidades para compartir. Incorporar oportunidades para practicar compartir en el ambiente de la casa o la escuela, puede ayudarles a los niños a tener más confianza en sus habilidades. Por ejemplo, podría intencionalmente colocar insuficientes juguetes/libros/barras de pegamento para una actividad. Podría decirles a los niños, “Hmmm, parece que no hay suficientes barras de pegamento para todos. ¿Qué podemos hacer?” Deles una oportunidad para demostrarle lo que saben hacer y ayúdeles a buscar soluciones, si es necesario.
  • Elogiar su esfuerzo.  Reconocer que compartir puede ser difícil. Incluso los adultos a veces no lo hacen bien. Asegúrese de elogiar a los niños (nombrar la habilidad) cuando comparten bien, diciendo cosas como, “¡Wow! ¡Realmente sabes compartir!” y “¡Eres un muy buen amigo! Me imagino que Jesús se sintió bien cuando compartiste tu camión con él.”
Además, asegúrese de dar muchos elogios cuando los niños manejan bien la decepción de no conseguir lo que querían. Aunque compartir es una habilidad social importantísima, está bien si los niños a veces deciden no compartir. Motivarles a manejar bien su decepción puede ayudarles a mantener una relación positiva con sus compañeros. Puede decir cosas tales como…
    • Es difícil esperar”
    • “¡Bien hecho!, dijiste, ‘Ni modo’”
    • “¡Me gusta mucho como manejaste esa situación! ¿Te gustaría ver estas cosas geniales que tengo aquí?”
Enseñar con libros
Modelar, practicar y proveer oportunidades para compartir son maneras muy útiles para que los niños fortalezcan su habilidad de compartir. Y los libros pueden proveer una oportunidad maravillosa para aumentar su habilidad de compartir. Aquí hay algunos libros acerca de la amistad y cómo compartir:
El Pez Arcoiris por Marcus Pfister
Bajo la Luna de Limón por Edith Hope Fine
Un día diferente para el señor Amos por Philip C. Stead
Me encanta compartir por Shelley Admont
It’s Mine by Leo Lionni



lunes, 23 de septiembre de 2019

INCLUSIÓN DIGITAL PARA ANEAE




En la web diseñada por Milagros Rubio Pulido, podemos encontrar  una recopilación de portales y herramientas online para trabajar con alumnado con necesidades de apoyo educativo ANEAE.

Categorizando la información  en diferentes secciones. 

Debes  visitar esta web porque está genial!!!

Muchas gracias Milagros por toda esta recopilación.


domingo, 22 de septiembre de 2019

JUEGOS Y ACTIVIDADES DE OTOÑO PARA COMPARTIR EN FAMILIA.



Hola de nuevo!

Tras meses sin publicar nada por aquí..... conciliar vida familiar, laboral y poco tiempo libre,  hace que me sea a veces imposible.

No me olvido de mi blog  y en el curso pasado subí algunas  cosas por  la cuenta de Instagram.

Intentaré seguir por aquí y compartir noticias, materiales, recursos que nos pueden interesar, dicho esto.... la entrada de hoy está dedicada al Otoño ,que llega mañana .

Me encanta esta estación del año, ¿os habéis dado cuenta de cuántas cosas podemos hacer con nuestros peques? Os dejo una serie de juegos y actividades que os pueden dar muchas ideas.

  1. Abrid los ojos y descubrid lo que la naturaleza os cuenta. Todos sabemos que en otoño las hojas se tornan marrones y caen pero ¿habéis mirado alguna vez con curiosidad lo que realmente os ofrece la naturaleza en esta época del año?. Así que salid a la calle y mirad: mirad para arriba, para el medio, para abajo, para arriba y abajo; y jugad a descubrir qué cosas van pasando día a día en vuestro entorno inmediato.
  2. Recolectad hojas. Un paseo de vuelta del colegio y/o por el campo puede ser una buena ocasión para ir recolectando hojas diferentes, de árboles diferentes para llevarlas a casa y observarlas luego en familia, pero descubriendo en el lugar cómo son esos árboles, qué características y diferencia entre ellos tienen… Hasta podrías llegar a comparar cómo son los árboles de la ciudad y los del campo… Seguro que llegáis a varias conclusiones interesantes.
  3. Organizad un paseo por el campo. La naturaleza nos ofrece un lienzo lleno de colores mágicos que se han de ver en vivo y en directo. Y son mágicos porque van cambiando semana a semana. Organizad con la familia una salida al campo con una ruta sencilla o que sea simplemente para ir a tomar un picnic hecho por vosotros y disfrutad del paisaje sin más. Puedes crear una tradición familiar donde cada comienzo de estación vayáis al mismo sitio a ver cómo se encuentra la naturaleza en esa época del año.
  4. Recoged frutos. Este mes es el mes de las castañas, los piñones y las nueces, entre otros frutos. Es una oportunidad perfecta para ir al campo y buscar castaños, pinos piñoneros y nogales, (uno por vez mejor, así os podéis concentrar en cada árbol). Si hay algo que me gusta, es que mis hijos sepan de dónde vienen las cosas y qué se hacen con ellas. Pues esta es una gran oportunidad porque tanto las castañas como los piñones y las nueces están escondidos y podemos jugar a descubrirlos, a buscarlos y atraparlos; jugar a distinguir los árboles y a comenzar a llamarlos por sus nombres…
  5. Jugad a crear instalaciones efímeras de Land Art. Al caer las hojas y los frutos tenemos, en esta época del año, los materiales naturales a nuestros pies. Pues qué mejor idea de crear nuestra propia obra de arte en la naturaleza y dejarla para que otros se la encuentren y puedan disfrutar. Dejad volar la imaginación y trabajad en equipo para que el disfrute sea compartido; recordando siempre que lo más importante es el proceso y no el final!
  6. Jugad con los colchones o la lluvia de hojas. Las hojas forman gustosas alfombras en el suelo que tanto pueden servir para tumbarnos sobre ellas como para hacerlas volar y crear nuestra propia lluvia de hojas otoñales. A los niños les encanta y casi, casi lo hacen instintivamente. Seguramente que te vean a ti disfrutando de este momento, será su gran regalo.
  7. Visitad un huerto. Procura acercaros a algún huerto para poder descubrir cuales son las hortalizas, verduras y frutas de temporadas. Hoy en día hay muchos huertos ecológicos que abren sus puertas para enseñar su cosecha y descubrir las maravillosas formas de las calabazas, los boniatos, berenjenas… Y os podéis llevar una buena cesta para cocinar en casa.
  8. Organizad una búsqueda de tesoros otoñales. Descubre el por qué es interesante este tipo de juego e inspírate en la plantilla gratuita de búsqueda del tesoro, adaptándola a esta estación. Seguro que es un muy buen aliciente para ellos para ir a la montaña.
  9. Organizad una búsqueda de colores en la naturaleza. Como verás más abajo, cada estación tiene unos colores característicos que a veces los niños y niñas nos sorprenden con más colores y gamas de los que nosotros tenemos concebidos. Por eso, esta actividad te la recomiendo hacer después de realizar la rueda de las estaciones así puedes poner gran parte de los colores del otoño que hayáis detectado. La idea es crear un soporte con los colores de temporada a buscar y salir en busca de ellos como te explicaba en esta actividad de «educar la mirada».
  10. Salid a la calle a jugar con los charcos. El otoño tiene días de lluvia con una temperatura agradable donde poder salir fuera, bien preparados para jugar con la lluvia y todo lo que ella trae.  La importancia de transmitir una sensación positiva con respecto a la lluvia, porque en realidad en nuestro país, cuando llueve: hay que salir a celebrarlo.
  11. Explorad qué pasa con los insectos y los animales en esta época. Hay un cambio considerable, sobre todo en lo que a insectos se refiere, con respecto al verano. ¿Seréis capaces de descubrir cuáles son los animales e insectos que están visibles en otoño? ¿Y qué les está pasando a ciertas aves que van volando en formación por el cielo?
  12. Degustad los arcoiris. Después de la tormenta sale el sol y muchas veces en esta época, la naturaleza nos regala como broche final de la lluvia, unos arcoirirs espectaculares. Así que a poner atención y degustar esos momentos de forma mágica.
  13. Títeres otoñales.  Contar historias y recurrimos a cualquier cosa como pretexto para contarlas. Pues qué te parece buscar los recursos de la naturaleza como hojas, palos, frutos para contar una historia allí mismo. A ellos les encantará y estarás siendo un muy buen ejemplo de como encontrar soluciones en momentos inesperados.
  14. Observad vuestros tesoros otoñales. De los paseos por el exterior y los tesoros que encontraréis, podéis buscar un momento para observarlos, sentirlos y explorar sus diferencias y similitudes. Te propongo que traigas una lupa y una cartulina blanca (por si la mesa es de otro color), dejar cerca también una libreta y unos lápices por si de la exploración quieren pasar a la interpretación de esas formas.
  15. Jugad a clasificar el material. Ofrece cestos donde puedan ir guardando sus tesoros clasificados (aunque ten en cuenta que la clasificación cada uno la puede entender a su manera, así que abre bien los ojos para descubrir cuál es la de cada uno).
  16. Cread material didáctico otoñal  Por ejemplo con una hoja de color otoñal, castaña, calabaza, boniato, piñones, nueces… Vaya que la idea es ir haciendo fotos a cada tesoro y diseñar unas sencillas cartas (plastificadas) para tener en casa junto a cada elemento real. Estas cartas luego pueden servir para ir comparando las temporadas. También puedes crear plafones con las diferencias de cada árbol. Por ejemplo un castaño: donde aparezca la hoja, el erizo, el fruto… Como si fuera una lámina naturalista pero hecha de piezas reales.
  17. Cread material decorativo. Podéis utilizar las hojas para pintarlas, crear guirnaldas con hojas sencillas como las de Alisa Burke o combinando hojas, frutos, frutas,.. Imaginación al poder.
  18. Cread un rincón o mesa de otoño en algún espacio común de la casa. Es una actividad muy característica de la pedagogía Waldorf que da importancia a los ritmos de la vida, procurando ofrecer experiencias para que el niño y la niña se sitúe en el tiempo, viva los cambios naturales y forme parte de los acontecimientos. Un poco lo que estamos viendo, va en esta línea, y en este caso específico te propongo crear vuestra mesa de estación. Podéis poner vuestros tesoros, los plafones de los árboles y las cartas creadas, adornarla con vuestras creaciones y buscar libros infantiles que hablen de esta época del año .
  19. Crea un Atelier inspiración Reggio Emilia con arcilla o pasta de sal y los elementos naturales que tengáis por casa. La idea es ofrecer ese material clasificado que habéis encontrado en la naturaleza junto a trozos de barro o pasta de sal. Colócalos sobre una mesa que no tenga más estímulos que estos materiales como provocación. A partir de aquí deja que se relacionen con el material y a ver qué surge.
  20. Cocinad recetas en familia con comida de temporada. Buscar un recetario de los de siempre o preguntar a los abuelos qué podéis hacer con los alimentos de los árboles y del huerto de esta temporada y cocinar en familia ese plato especial y hacer de esa comida, un momento único en familia, ideando una mesa especial (tenéis mucho material para decorar).
  21. Celebrad las fiestas tradicionales. En cada región habrá una fiesta tradicional que celebrar.  Pues integra aquellas fiestas que te gusten o que gusten a la familia (aunque a veces a los adultos no nos gusten tanto) y hacer del momento una celebración familiar compartida y divertida. 
  22. Cocinad recetas dulces para las tardes de otoño. Comienzan a acortarse las tardes y a refrescar esto me lleva a pensar a cambiar el ritmo, a meternos en casa y disfrutar del hogar. Y siempre, siempre me viene a la mente el hacer galletas. 
  23. Explorad el tema arcoirirs. Después de degustarlo en directo, en casa podéis investigar el por qué sucede, buscar cuentos o historias relacionadas como la que al final del arcoiris se encuentra enterrada la olla llena de oro de los Leprechaun (duendes irlandeses), buscar de qué forma podéis crear arcoiris en casa (hacer una lluvia de ideas) y probar de hacerlo…
  24. Haced harina de mandarina. Es la época de las mandarinas , así que guardamos las pieles de las mandarinas para secarlas y convertirlas en una harina de mandarina que la utilizamos para jugar, ya sea como elemento de juego en la cocinita o como bandeja sensorial. 
  25. Seguro que con esto ya tienes donde empezar a disfrutar del otoño con tu familia de manera lúdica, divertida y respetuosa. 
Todas estas ideas han sido sacadas de la web rejuega.com , muchísimas gracias  Yessica por tantas actividades y juegos otoñales para disfrutar con nuestros peques.